Y como para pelear se necesitan dos, y yo no acepto la pelea, pues… no peleamos – Santa Mónica
Somos propensos a entrar en polémicas estériles y peleas sin sentido. Diariamente, nos encontramos en situaciones en las que nuestra soberbia nos impele a mostrarnos altaneros, engreídos y sabedores de todo. Discutimos por nimiedades y negamos al otro que tenga parte de razón en sus planteamientos. Incluso llegamos a acalorarnos y a pasar a la […]