Diariamente asistimos a la guerra que provocan tantas y tantas palabras que no debieron pronunciarse, tantas y tantas amenazas de odio, destrucción y muerte. El mundo hoy requiere, para que haya paz, menos voces, menos descalificaciones y más silencio. También nosotros tenemos mucho que callar para contribuir a instaurar la paz en nuestros corazones y en los de los que nos rodean.
En la cruz, Jesús ha derribado el muro de la enemistad, que separa a los hombres y a los pueblos, ha traído la reconciliación y la paz – Papa Francisco
Cristo, estás clavado en la cruz. Eres inocente, sí, pero aceptas entregar tu vida por cada uno de nosotros. Este madero que