Quien ama de verdad siempre da el primer paso. No se queda a la espera de que sea el otro quien lo haga. Dar el primer paso significa ser el primero en servir y el último en recibir. Dar el primer paso es ser el primero en pedir perdón y el primero en echar una mano cuando es necesario. Dar el primer paso supone no tener nunca en cuenta las ofensas del otro, ni desconfiar de los demás. Dar el primer paso es ponerse en camino para construir un mundo mejor.
El peldaño más bajo de esta decadencia moral es la soberbia. El hombre rico se viste como si fuera un rey, simula las maneras de un dios, olvidando que es simplemente mortal – Papa Francisco
La sociedad en la que estamos inmersos necesita personas humildes, serviciales y honestas. Sobran los soberbios que se consideran superiores a los