A veces confundimos el amor con otras muchas cosas que los hombres hemos inventado para justificar nuestros egoísmos personales. Quien ama de verdad tiene que estar dispuesto al sufrimiento, incluso a la entrega de sí mismo, y esto siempre es doloroso. Pero, al mismo tiempo, llena de gozo pues el amor total es la antesala de la gloria que nos espera.
“La perfección cristiana sólo tiene un límite: el no tener límite” – San Gregorio de Nisa
Si deseamos ser perfectos, meta a la que debemos aspirar como creyentes, porque es lo que se nos pide, debemos convencernos de