Memoria de Nuestra Señora de los Dolores, que, de pie junto a la cruz de Jesús, su Hijo, estuvo íntima y fielmente asociada a su pasión salvadora. Fue la nueva Eva, que por su admirable obediencia contribuyó a la vida, al contrario de lo que hizo la primera mujer, que por su desobediencia trajo la muerte.
Otros santos del día:
• En Roma, san Nicomedes, mártir, cuyo cuerpo, guardado en el cementerio junto a la Vía Nomentana, fue honrado por el papa Bonifacio V con un templo sepulcral.
• En Tournus, en el territorio de Chalons, a orillas del Saona, en la Galia Lugdunense, hoy Francia, san Valeriano, mártir.
• En Tomi, hoy Constanza, en la Escitia, en Rumania, santos Estratón, Valerio, Macrobio y Gordiano, mártires, cuya pasión ocurrió, según parece, siendo Licinio emperador († s. IV).
• A orillas del Danubio, en territorio de la actual Rumanía, san Nicetas Godo, mártir, a quien el rey arriano Atanarico mandó quemar en odio a la fe católica (hacia el año 370).
• En Lyon, en la Galia, actualmente en Francia, san Alpino, obispo, sucesor de san Justo († s. IV).
• En Toul, cerca de Nancy, también en la Galia Lugdunense, hoy Francia, san Apro, obispo († s. VI).
• En el monasterio de Jumieges, cerca de Rouen, en Neustria, hoy en Francia, san Aicadro, abad, discípulo y sucesor en el cargo de san Filiberto († s. VII).
• En Córdoba, en la región hispánica de Andalucía, santos mártires Emilas, diácono, y Jeremías, que fueron decapitados por su fe cristiana durante la persecución sarracena, después de sufrir una larga y dura prisión († 852).
• En Busseto, en la región de Fidenza, en la Emilia-Romaña, región de Italia, beato Rolando de Médicis, anacoreta, que pasó una vida solitaria por los duros Alpes, viviendo en gran penitencia y conversando sólo con Dios († 1386).
• En Génova, en la Liguria, también de Italia, santa Catalina Fieschi, viuda, insigne por el desprecio de lo mundano, por sus frecuentes ayunos, amor de Dios y caridad para con los necesitados y enfermos († 1510).
• En la ciudad de Hirado, en Japón, beato Camilo Costanzo, presbítero de la Compañía de Jesús y mártir, que, mandado a la hoguera por el regente supremo Hidetada, no cesó de predicar a Cristo aún en la misma pira († 1622).
• En la localidad de Santo Domingo de Xagacia, en México, beatos Juan Bautista y Jacinto de los Ángeles, mártires, que, siendo catequistas, al pretender remover los ídolos para servir a Cristo, fueron apaleados cruelmente, imitando la pasión de Cristo y alcanzando el premio eterno († 1700).
• En Viena, en Austria, beato Antonio María Schwartz, presbítero, que fundó una congregación de operarios cristianos bajo la protección de san José de Calasanz, para cuidado pastoral de principiantes y jóvenes obreros y para la defensa de sus derechos († 1929).
• En Palermo, en Sicilia, región de Italia, beato José Puglísi, presbítero diocesano y mártir, más conocido por Pino Puglisi, que durante los treinta y tres años de su ministerio pastoral se dedicó incansablemente al anuncio del Evangelio, especialmente a sus “preferidos”, los niños, los abandonados y los pobres, y fue asesinado por agentes de la mafia († 1933).
• En Llosa de Ranes, en la provincia de Valencia, en España, beato Pascual Penadés Jornet, presbítero y mártir, que en la persecución religiosa durante el tiempo de guerra cambió su combate terreno por el gozo eterno († 1936).
• Cerca de Munich, ciudad de Baviera, en Alemania, beato Ladislao Miegon, presbítero y mártir, que, desde Polonia, dominada por un régimen dictatorial ofensivo a Dios y a los hombres, a causa de su fe fue llevado al campo de concentración de Dachau, donde el tormento lo coronó de gloria eterna († 1942).
• En Nápoles, en Italia, beato Pablo Manna, presbítero del Pontificio Instituto para Misiones Extranjeras, que fue misionero en Birmania, pero por razón de su salud hubo de dejarlo, dedicándose a la evangelización, a la predicación de la palabra de Dios y a favorecer la unión de los cristianos († 1952).
• En Palermo, en Sicilia, en Italia, beato Giuseppe Publisi, apodado Pino, sacerdote diocesano, asesinado por odio a la fe por la mafia siciliana a la que enfrentó con gran valor († 1993).
(Del Martirologio Romano)