Amigos de Dios y amigos de los que conviven con nosotros y también de los que no conocemos. La familia que el Señor quiere que formemos es la que se basa en la amistad desinteresada. La que no busca beneficios personales. Una amistad que se da por completo, sin esperar nada a cambio. Una amistad que es servicio y entrega. Una amistad que renuncia al propio yo para abrazar el nosotros.
La bondad es lo que importa, pues es el bálsamo que pone un poco de suavidad en cualquier amarga llaga – San Pío X
No nos cansemos nunca de obrar con bondad, pues es lo que Dios quiere de nosotros. Si así lo hacemos, estaremos inmunizados